De repente mi cuerpo se llena de un miedo inmenso, al pensar que en un tiempo quizás seas vos el que me diga que no, y que con el tiempo simplemente, yo, te deje de importar... Si tus abrazos tiene ese calor que a veces tanto necesito, que a veces son lo único que pueden calmar esta sed, que haría yo sin ellos... Si cuando estoy mal todo lo que necesito es escucharte, y es como si la tormenta cesara por completo y saliera un sol resplandeciente, apuntandome justo a la cara, sintiendo ese calorcito de la mañana en primavera, si tus besos son mi calma, mi paz, que haría yo si un día decidieras tu, que no más... Hay momentos en los que estoy tan segura de que por mas que lo intente mil veces, esto no se va a terminar mas, y sabes que ? Me alegra esa seguridad, porque muy en el fondo, no quiero que se termine, no quiero perderte, no te quiero lejos, no hay sonrisas mas lindas que las que vos sacas de mi... Pero hay otros momentos, en los que nos miro, tan distantes, con mis inestabilidades todo el tiempo, que ambos con nuestras cosas alejamos al otro, y terminamos alejandonos por completo, y me da miedo... si, mucho miedo de perderte completamente... Me diste luz, cuando crei que ya no había más, y creyendonos amigos, ocupaste otro lugar en vida, poco a poco te ganaste todo lo que hoy puedo darte...